Este pequeño principado es conocido por su casino, por el glamur y el lujo que lo rodea. Es una ciudad en la que se esconden maravillosos detalles por todas partes.
Dificilmente podrás encontrar una noche de hotel por debajo de los 500€. Si hablamos de fechas señaladas, como por ejemplo durante el conocido premio de Fórmula 1, la ilusión de pernoctar allí se hace difícilmente accesible para aquellos que no tienen un doble fondo en su billetera.
Una de las actividades más fabulosas de las que pudimos disfrutar allí, fue la de dar un paseo en un increíble Rolls Royce. Conocimos el recorrido de Fórmula 1, nos dejamos llevar por aquellas curvas imaginando la adrenalina que deben sentir los pilotos de esta modalidad al recorrerlas rápido y sin miedo.
En cualquier caso, ha sido una experiencia inolvidable poder conocer esta lujosa ciudad. Caminar por sus paseos revestidos de mármol, o contemplar los amarres en puerto te deja con ganas de soñar.